Hoy queremos poner en las manos de Dios a nuestros niños, adolescentes y jóvenes para que Dios pueda guiarlos en cada uno de sus caminos…

sabemos que ellos son las personitas mas vulnerables y las que menos se pueden defender hay que tratar de darles el mayor apoyo posible y como padres debemos enseñarles a enfrentar la vida de forma que a ellos no se les vulnere tanto sus derechos…Dios los bendiga siempre.